LAS COSTUMBRES PORTEÑAS TAMBIEN SON VICTIMAS DE LA INFLACION Y DISTORSION DE PRECIOS
Un relevamiento realizado en la última semana en más de 200 locales a la calle de una docena de barrios de la ciudad de Buenos Aires permitió comprobar que la distorsión de precios también golpeó con fuerza a algunas de las costumbres más arraigadas en los vecinos porteños.
La muestra, realizada entre el 4 y el 7 de mayo por el Centro de Estudios Nuevo Milenio, determinó que el precio promedio de una grande de muzzarella es de 121,68 pesos por unidad, tomando en cuenta el precio de referencia colocado en pizarras o vidrieras de cada uno de los negocios relevados.
En el caso del café el número es de 31,66 pesos, incluyendo en el estudio a los comercios tipo cadena o franquicias, tanto nacionales como importadas, y a los típicos bares de barrio, incluso algunos en los que las barras todavía son de estaño y se juega al billar.
̈Salimos a la calle y realizamos un amplio relevamiento de a pie para comprobar cuales son los valores reales de la economía, al menos en algunos de los productos masivos o de consumo casi diario de los porteños ̈, explicó Daniel Amoroso, director Ejecutivo de Nuevo Milenio.
Amoroso aclaró que ̈seguramente en algunas ocasiones pueden encontrarse promociones por cantidad o por realizar pedidos por internet con menores costos, pero esta muestra nos otorgó la posibilidad de verificar una amplia distorsión de precios en un mismo producto no sólo entre diferentes barrios, sino también en una misma zona y a poca cuadras de distancia ̈.
En el caso de la docena de Facturas, aún incluyendo en el estudio a las franquicias que abaratan el promedio, el precio intermedio es de 66,67 pesos, mientras para el kilogramo de pan blanco o francés el valor es de 33,46 pesos.
̈En el caso del pan y la facturas, al tratarse de rubros con un fuerte control de las cámaras que agrupan a productores de insumos y las propias panaderías, la distorsión es menor pero lo llamativo es que en zonas de alto poder adquisitivo, como Belgrano-Núñez, la amplia cantidad de negocios en competencia hace que los precios sean más bajos que en otras zonas ̈, resaltó Amoroso.
Así es como la docena de facturas en Belgrano-Núñez promedia 58 pesos contra casi 70 de los barrios vecinos como Saavedra o Villa Urquiza.